Los grilletes están fabricados mediante un proceso de forjado, templado y revenido, lo que les proporciona una alta resistencia. Están equipados con pernos de aleación y tienen un cuerpo galvanizado por inmersión en caliente para mayor durabilidad. El pasador es electrogalvanizado y luego se le aplica una capa de pintura pulverizada de plástico para protegerlo de la corrosión, y su pasador también está galvanizado en caliente antes de ser pintado. El espesor del recubrimiento de zinc es de aproximadamente 100 micrómetros (700 gr./m2), lo que asegura una excelente protección contra el desgaste. Además, cumplen o superan los requisitos de la especificación federal americana RR-C-271D, tipo IVA, Grado A, clase 2, así como la norma ASME B30.26, que garantiza su fiabilidad y seguridad en aplicaciones industriales.