El respirador ofrece una protección eficiente y confiable contra partículas sólidas y líquidas, tanto acuosas como aceitosas, con una eficiencia mínima del 99,95%. Está diseñado para proteger las vías respiratorias frente a sustancias como carbón, algodón, aluminio, trigo, hierro, sílice libre cristalizada, plomo, cadmio, arsénico y asbesto, entre otros.
Es ideal para aplicaciones como soldadura eléctrica, trabajos con revestimientos asfálticos y procesos donde se generen niveles molestos de vapores orgánicos por debajo del Límite Permisible Ponderado (LPP).
El diseño de este respirador destaca por ser liviano y de bajo perfil, ofreciendo comodidad durante su uso. Además, incluye capas impregnadas de carbón activado que proporcionan alivio frente a niveles molestos de vapores orgánicos, asegurando un entorno más seguro y saludable para el usuario.